“Quizás se sentía aislado y trataba de buscar una salida, pero había mucha gente” en el lugar, explicó un jefe policial, quien afirmó que la población entró en “pánico” durante la incursión del elefante.
Al final, se logró apresar al paquidermo, sedarlo y trasladarlo de nuevo al bosque.
Escenas como estas son más frecuentes, debido a la pérdida del hábitat natural de los animales salvajes por la creciente expansión y necesidad de las personas al acaparar cada vez más terreno.
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