Los vecinos de Totonicapán se enfrentan a una situación caótica y aterradora, más aún para quienes defienden los derechos de los animales. Últimamente, cientos de perros muertos aparecieron tirados en pleno parque de la comunidad y en calles aledañas, al parecer, todos ellos envenenados.
Entre dimes y diretes, los vecinos afirman que quienes están detrás del exterminio canino son las autoridades municipales, mientras que éstas aseguran que los responsables son los 48 cantones y estos, a su vez, aseguran desconocer el caso y niegan haber intervenido en el envenenamiento.
Flor de María Pérez, una vecina del lugar, explica que para envenenar a los animales, sujetos malintencionados introducen veneno en chorizos o longanizas y luego las tiran en el parque central para los perros se las coman. Pérez afirma que es una medida muy cruel ya que el animal sufre mucho antes de morir. “Al instante empiezan a convulsionar, vomitan y agonizan lentamente. Mucha gente les da leche y huevos para tratar de hacerlos vomitar pero ya no reaccionan”.
Asegura que los posibles responsables de la matanza podrían ser las autoridades municipales.
“La última vez nadie se asomó a recoger a los perros muertos, nosotros suponemos que fue la misma Municipalidad quien finalmente los recogió, pero no es nada más de ir a dejar a un animal envenenado al barranco”, puntualizó.
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El problema del sectorEn Totonicapán, la sobrepoblación de perros (que se estimaba por encima de 400 antes de que fueran envenenados) representa un problema Municipal que se arrastra desde décadas atrás, según cuentan vecinos.
En repetidas ocasiones, los habitantes del lugar se quejan de que los perros son agresivos y muerden a las personas que pasan enfrente. Sin embargo, Alicia Mejía, una vecina que emprendió una campaña de castración, rescate y adopción para erradicar el problema, afirmó que los animales tienen razones justificadas para atacar a la gente ya que muchos les pegan en sus genitales o los agreden con con cuchillos sin justificación alguna.
¿Qué dice la Municipalidad y los 48 cantones?Mejía supone que quienes están detrás de esto son los 48 cantones y la Municipalidad de Totonicapán, aunque estos lo niegan.
“En ocasiones anteriores ellos han dicho que el exterminio de los perros es la mejor solución aduciendo que los animales constituyen un riesgo para la integridad de las personas. ”, dijo Mejía en referencia a los 48 cantones.
Además, mencionó que muchos de ellos se oponen a las jornadas de castración, ya que creen que con esas medidas se extinguirá a la especie canina. Héctor Gutiérrez, miembro de la junta directiva de los 48 cantones, aseguró que ellos no tienen nada que ver con el envenenamiento de los perros ni tampoco se han opuesto a las jornadas de castración.
Gutiérrez dijo que desconoce si en ocasiones anteriores los 48 cantones han emprendido medidas de este tipo, ya que cada año se cambia a los directivos de esa organización.
Cayetano Alvarado, gerente de la Municipalidad de Totonicapán, mencionó que la matanza puede ser responsabilidad de los 48 cantones y otras autoridades comunitarias. Sin embargo, reconoció que no es su prioridad dar con los responsables porque para ellos el envenenamiento de los perros no representa un problema de mayor interés.
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