Con esto, el servicio sanitario busca que si algún residente o trabajador observa excremento, cuelgue una fotografía a través de la app y hagan un comentario al respecto, y al cargarse en la plataforma, automáticamente el teléfono da la ubicación y señala en el mapa.
Ante ello, un funcionario sanitario medioambiental expresó en un medio local: “No vamos a recogerlas inmediatamente”.
Sin embargo, tras una serie de publicaciones, las áreas con gran cantidad de heces aparecerán en el mapa para concienciar del problema y ayudar a revisar las rutas de los G-men (hombres G), los trabajadores municipales encargados de la limpieza.
En Izumisano viven unas 100 mil personas, y en el pasado ya habían implementado tarjetas amarillas en los sitios con heces y poniendo multas, como medida para hacer más responsables a los dueños.
La aplicación también servirá para enviar información sobre las vías que necesiten repararse y daños ocasionados por desastres.
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